El que persevera siempre alcanzará sus metas. Lucho Pérez es un pelao bien trabajador. Él siempre anda viendo la manera de buscar el pan, hasta vendiendo chorizos, pescando, cantando o haciendo lo que sea menos quedarse de brazos cruzados. Hoy, enlodado y sudado, solo puede agradecer por las bendiciones que le da "Papa Dios".
"No hay que rendirse muchachos, hace un año yo no tenía donde vivir, gracias a Papá Dios está mandando bendiciones", dijo.
Eso sí, deja claro que todo se consigue con esfuerzo, perseverancia y fe: "no hay que dejar caer los brazos… todo está aquí ve (señala la mente), el que se rinde es porque se rinde primero de acá".
Pide a Dios todos los días que las cosas mejoren en el mundo: "bendiciones y recuerden, un hombre que no tiene metas no es capaz de controlar nada".
Aunque en estos momentos, son muy pocos los eventos típicos que han podido darse, Lucho y su conjunto "Los líderes musicales" cada vez tienen más presentaciones.